Un disco duro externo es una unidad de almacenamiento de información, el cual se conecta a un equipo local, como portátil, PC, tablet, etc, para el resguardo de datos. Esta información se puede compartir con otros dispositivos.
Adicionalmente, sirve para expandir la capacidad del ordenador o sencillamente hacer copia de seguridad de los datos almacenados en el disco duro interno de un computador previniendo la posibilidad de una falla y perder toda la información.
Disco duro externo magnético: Utiliza el campo magnético para almacenar la información. Cuenta con un cabezal que lee y graba los datos. Por estar compuesto de partes mecánicas, su traslado tiende a ser delicado y sensible a caídas y golpes. Ofrecen mayor capacidad de almacenamiento que los discos sólidos, pero son más lentos y frágiles que los modelos SSD. Resultan ser más económicos. Se recomiendan para guardar datos e información personal y profesional.
Disco duro sólido o SSD: Son más costosos que el tipo anterior. Su funcionamiento es diferente, ya que poseen una memoria RAM para el resguardo de la información. Por lo que no tienen cabezal, ni partes móviles, solo un controlador. Por lo que resultan más prácticos, duraderos y cómodos de transportar. No genera vibraciones mientras se hace la transferencia y respaldo de los datos. Ideales para almacenar herramientas y programas de trabajo.
Tamaño: Pueden ser de 2,5″, los cuales reciben la energía directamente del equipo al cual se conectan y los de 3,5″ que consumen más energía, por lo que requieren una fuente adicional.
Velocidad: Los discos mecánicos trabajan con revoluciones por minuto para conocer la velocidad de lectura y escritura de datos. Generalmente se encuentra entre 5400 – 10000 RPM. Para lograr las máximas velocidades de transferencia de datos se recomienda un disco SSD.
Interfaz: Regularmente se conectan mediante cable USB, que es la forma más común o SATA externa.
Conexión: Algunos modelos incorporan conexión WIFI para almacenar y enviar los datos. Entre estas se tienen:
Conexión USB 2.0: Su máxima velocidad de transferencia de datos es de 60 MB/s.
Conexión USB 3.0: Permite alcanzar velocidades de 300 MB/s., aprovechando totalmente la conexión de los tipo HDD cuya velocidad de lectura y escritura se ubica entre 80 – 150 MB/s. Por otra parte, si se quiere usar la máxima velocidad de este tipo de puerto, se recomienda utilizar un disco SSD cuya velocidad supera los 500 MB/s.
Conexión eSATA: Es conocida como una interfaz de uso principalmente profesional si se compara con USB. Su velocidad de transferencia puede alcanzar hasta 300 MB/s. Esta conexión fue diseñada para usarse con discos duros de ordenadores para arquitectos o diseñadores gráficos.
Capacidad: Según la necesidad de cada usuario, se tienen diversos modelos de disco duro con capacidades variables. Los actuales cuentan con un almacenamiento de varios terabytes. Primeramente, debemos conocer qué tipo de información necesitamos guardar en él, para así definir la capacidad requerida del disco. Si estamos interesado en almacenar películas, videos y música, será necesario adquirir un disco con capacidad superior a 1 TB, ya que estos formatos son pesados y de esta manera evitaríamos forzar el dispositivo. Los discos magnéticos cuentan con capacidades más altas que los discos en estado sólido.
Diseño, Materiales y Peso: Mientras mayor capacidad tenga el disco, mayor peso. Debemos enfocarnos en buscar un disco que haya sido elaborado con materiales resistentes. Que su carcasa sea sólida y tenga un bonito diseño. Se tienen modelos resistentes al agua y caídas, aunque estos tienen un costo más elevado. Todos cuentan con luz LED de color azul o blanco para indicar que está en funcionamiento.
Cuidado: Como todo dispositivo, los discos duros externos requieren de cierto cuidado para alargar su vida útil y principalmente para mantener nuestra información resguardada.
Alta capacidad de almacenamiento: Muchas veces estos discos superan el espacio permitido que traen nuestras PC, laptop y/o tablet para guardar información.
Compatibilidad: Pueden trabajar sin problemas conectados a ordenadores, tablets, videoconsolas, televisores, equipos de música, etc.
Transferencia de datos: La velocidad para guardar los datos de un disco duro externo es mayor a la velocidad de un disco duro de una PC. Pasar largas horas transfiriendo una información es cosa del pasado.
Basta con conectarlo para ponerlo a funcionar.
Son de fácil transporte y manejo, ocupan poco espacio. Tienen un peso ligero. Al comprarlo, se puede adquirir un forro o estuche para que quede más protegido.
Si se cuidan y se les da buen uso, suelen durar mucho tiempo.
El almacenamiento de la información está seguro, sin posibilidad de daño prematuro, como pasa con los datos respaldados en un CD o DVD.
Pueden ser delicados a golpes y caídas.
Algunos modelos requieren de una fuente de energía alternativa para su óptimo funcionamiento.
Algunos no disponen de ventilador, lo que genera sobrecalentamiento en el dispositivo o cable de alimentación.
Son sensibles a la luz solar si se exponen por un periodo largo de tiempo, provocando calentamiento o deteniendo su funcionamiento.
Regularmente cuentan con cable de conexión corto.
El mercado cuenta con una gran variedad d marcas y modelos de disco duros externos con capacidades de 500 GB, 1 TB, 2 TB, 4 TB, 5 TB. Solo necesitamos conocer el tipo y volumen de datos que queremos respaldar para hacer una comprar acertada, donde quedemos satisfechos con nuestra inversión. Entre las marcas más nombradas tenemos: Toshiba, Western Digital, Seagate, Hitachi y Maxtor.
Última actualización de precios y productos 2024-05-26